En una habitación de planta alargada y decorada en cálidos tonos crema y carmín, se ha distribuido este completísimo planchador al que no le falta ni un detalle.
Baldas y armarios de puertas opacas o de cristal se distribuyen a lo largo de la estancia, creando un espacio en él que todo tiene su sitio. 
El fregadero y electrodomésticos quedan ocultos detrás de dos puertas correderas de cristal translúcido, con el fin de ocultarlos cuando no estén siendo utilizados.
Sobre la zona de planchado se han ubicado varías perchas para colgar la ropa recién planchada y una lámpara de apoyo para iluminar bien esta zona.
Para ordenar todos los utensilios se emplearon también varios cajones de fibra que dan un toque tradicional a la estancia.
Ver esta cocina completa en la página web de Deulonder.
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